El buen comienzo de San Martín en la Primera Nacional obligó a buscar situaciones similares. No fue sencillo encontrar un equipo que haya pisado el acelerador a fondo desde la grilla de partida; de hecho, las grandes campañas “santas” casi siempre se constituyeron gracias a remontadas épicas.
Pero hace algunas semanas, la búsqueda llevó a dar con el histórico San Martín de Nelson Chabay, que en la temporada 1987/88 subió de la Liga a Primera casi sin tocar piedritas.
Favio Orsi y Sergio Gómez casi no querían ni mirar la estadística en ese entonces. Antes del duelo contra Defensores de Belgrano, el actual modelo necesitaba sumar una victoria y un empate en las siguientes dos jornadas para superar a la “máquina” del “Buche”. Y lo logró; el empate contra el “Dragón” y el contundente triunfo en la cancha de Quilmes marcaron al equipo de la dupla como el que mejor inicio logró en la historia “santa”, jugando campeonatos organizados por AFA.
Orsi no se acordaba del dato acercado por LG Deportiva. Pero no dejó de mostrar su satisfacción cuando se enteró de que la victoria ante el “Cervecero” les había abierto la puerta de la historia. “Es un enorme orgullo. Pero es todo del plantel, los jugadores lo lograron”, avisa el entrenador, explicando que siempre intentan dejar una huella. “Con Sergio siempre le decimos a los jugadores que en cada lugar deben dejar algo, una marca. Entonces está bueno haber logrado esto; pero esto nos obliga a seguir adelante, eh”, advierte.
“Los resultados están acompañando el trabajo y eso es importante porque no muchas veces pasa. Es lindo poder aportar algo a la historia de este club; ojalá sea el inicio de algo muy bueno”, agrega Gómez.
Lo cierto es que las cinco victorias (Villa Dálmine, Riestra, Brown de Adrogué, Tigre y Quilmes), los dos empates (Chacarita y Defensores de Belgrano) y la derrota (Sarmiento) le posibilitaron al actual plantel superar el comienzo que tuvo el equipo de Chabay que entre el Torneo del Interior y el zonal Noroeste de 1987/88, había sumado cinco victorias, un empate y dos caídas.
Además, quedó cerca de la marca también en la diferencia de gol. En la actual temporada, San Martín suma 13 goles a favor y seis en contra; mientras que aquella vez había marcado 16 tantos y había sufrido siete.
“Hay que seguir adelante”, pide Gómez, sabiendo que esto obliga a no relajarse. “Ahora la meta será entender que cada partido va a ser más difícil porque si ya de arranque querían ganarnos porque representamos a un grande; el estar bien posicionado representa otro desafío para los rivales. Tendremos que estar más concentrados, más preparados y sabiendo que cada juego tendrá una dificultad mayor”, remata Orsi.
El triunfo del pasado lunes no sólo trajo la confirmación de que el “Santo” quiere ser cosa seria esta temporada. En el comienzo superó a un equipo que terminó consiguiendo un hecho inédito en el fútbol argentino. ¿Tendrá esta historia el mismo final feliz que en aquella ocasión?
Recuperados
Matías Fissore y Ramiro Costa, los dos lesionados que tenía el plantel, ya trabajan con normalidad y están a disposición para el juego ante Atlético de Rafaela.